Hoy, me preguntaron como me sentía. Supongo que nunca las opciones que te dan son las que realmente sientes, no son claras, hay demasiadas emociones distintas. Por supuesto, tuve que poner que estaba bien. Si no, vendrían las preguntas, y siempre he odiado las preguntas. Sí, es raro. Me gusta que se preocupen por mí, odio las preguntas. Yo tampoco lo entiendo.
Sin embargo, me ha dado que pensar. Lo que siento hoy es melancolía por las cosas que tuvimos y nunca van a volver. Por conversaciones, por te quieros de personas que no lo repetirán. Por oportunidades que rechazamos. Por elecciones en las que nos equivocamos. Por la inocencia que perdimos. Por los abrazos que no se repetirán. Por el tiempo que hemos perdido tratando de cumplir sueños que no eran nuestros. Por lágrimas que derramé, que no volverán a mojar mis mejillas. Por personas que se perdieron por el camino. Por historias que nunca llegamos a contar, por preguntas que no serán respondidas...
"Puede ser que la respuesta sea no preguntarse por qué"
Supongo que nunca sabe uno lo que tiene que vivir al máximo, no nos damos cuenta de que cada momento, no tendrás la oportunidad de repetirlo. Es cruel e injusta, la vida entera. Solo intenta enseñarnos, supongo. Y a la vez, solo intenta hacernos daño.
"Será más divertido cuando no me toque perder"
¿Hay alguien que daría su vida? ¿Que ponga la felicidad de otra persona antes que la suya? ¿Hay alguien que realmente ame antes de ser amado? Sí, hay. Tal vez sean cinco mil personas entre 6 mil millones que hay en el mundo. Tal vez sean menos, tal vez sean más. Siempre tiendo a pensar en negativo, pienso que serán menos. Muchas menos.
Ese es mi fallo en el mundo. Hay personas por las que daría realmente la vida, sin pensar. Y me equivoco continuamente pensando que los demás también lo harán. Ingenua de mí. Supongo que la felicidad solo se consigue cuando aprendes a levantarte tras los palos que la vida te da.
"No sé restar, tu mitad de mi corazón"
Y vivo en busca de esas personas que darían su vida. De cosas pequeñas, frágiles que me hagan feliz. De amor, de sonrisas. De recuerdos, que son lo que nos ancla al pasado inevitablemente, pero que son lo que nos impulsa día a día. Busco aprender lo que necesito en esta vida. Busco poder apretar los puños ante el dolor, y expulsarlo lejos, muy lejos. Busco a alguien que me enseñe todo eso y que nunca, nunca me deje atrás.
"No podemos vivir sin recuerdos,pero tampoco podemos vivir solo de ellos.."
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